La administración tributaria y el sector prevén una caída del 12% en la recaudación por estimación directa del IRPF.
Una solución salomónica. Así se puede calificar la decisión adoptada ayer por la Administración Tributaria de mantener para el año 2012 la rebaja del 5 por ciento en la tributación del rendimiento neto de módulos para los autónomos y pymes que declaran por el método de estimación directa.
La tasa de reducción es similar a la aprobada para el ejercicio en curso y responde al criterio de adaptar la fiscalidad de módulos al descenso de
la actividad económica derivada de la crisis,
conforme a los acuerdos de la Mesa del Trabajo Autónomo. Sin embargo, las organizaciones representativas del colectivo de los autoempleados estiman que esta rebaja es inferior a la registrada en la caída del negocio para la mayoria de los sectores económicos. En concreto, los datos avanzados ayer por el secretario general de la unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Sebastián Reyna, reflejan que la reducción de las ventas en el comercio minorista ha sido del 6,9 por ciento hasta octubre, prácticamente dos puntos por encima de la rebaja fiscal acordada por Hacienda.
La reforma de la tributación por módulos "teniendo en cuenta las circunstancias de las empresas y la gestión tributaria" es uno de los compromisos asumidos por el Partido Popular en su programa de apoyo a los emprendedores, por lo que técnicos fiscales estiman que el Ejecutivo en funciones ha podido optar por "no mojarse" y dejar al nuevo gobierno que decida si aplica una rebaja mayor con la consiguiente pérdida de ingresos fiscales.
La tribuación por el sistema de módulos afecta en España a un millón de trabajadores autónomos y la recaudación tributaria obtenida de las declaraciones de este colectivo se sitúa en torno a 1.800 millones de euros.
Economía sumergida.
Pero la pérdida de recudación fiscal no afecta sólo al sistema de módulos. También los ingresos de Hacienda derivados de la tributación de los autónomos que declaran por el método de estimación directa del IRPF se encuentra en fase de caída libre, hasta el punto que tanto desde la administración tributaria como en el sector se prevè que la caída en las declaraciones medías de este colectivo se situará este año en torno al 12 por ciento, tasa similar a la del ejercicio pasado.
Para Sebastián Reyna, que presentó ayer el Anuario Estadístico del Trabajo Autónomos, el colectivo de los autoempleados debe jugar "un papel decisivo a la hora de articular la recuperación de nuestra economía" e instó al Gobierno que forme Mariano Rajoy a "aportar por este modelo de actividad económica y a que sus características aporten elementos de regeneración en el tejido productivo y cuestiones tan decisivas a la hora de aumentar nuestra competividad, como son el dinamismo y el emprendimiento". A este respecto, destacó la pérdida del 8,8 por ciento de autónomos menores de 30 años, consecuencia fundamentalmente del descenso de nuevas altas que atribuyó a la "falta de confianza".
En 2011 se perderán 30.000 emprendedores.
Aunque las cifras de afiliación del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) mostraba una subida en torno a 8.000 altas hasta septiembre, la cifra está influenciada por el repunte del tercer trimestre coincidiendo con la temporada alta del turismo. Sin empbargo, la evolución durante los meses de octubre y noviembre muestra ya una acusada involución y las previsiones de UPTA apuntan a que el año se cerrará con una pérdida aproximada de 30.000 emprendedores, que se habrán visto obligados a cesar en su actividad y cerrar sus negocios. De confirmarse esta tencencia, la pérdida de autónomos en términos netos sería inferior a los 56.567 de 2010, año en que se produjo ya una desaceleración en el ritmo de destrucción de empleo autónomo, respecto a los 152.544 caídos en 2009. Las previsiones de UPTA para 2012 apuntan a un nuevo empeoramiento.
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